El mes de noviembre de nuestro calendario «Tiempo de mujeres, mujeres en el tiempo» está dedicado a mujeres aventureras, mujeres que a pesar de vivir en una sociedad encorsetada donde tenían poca, por no decir ninguna, independencia se lanzaron a la aventura de explorar el mundo en el que vivían.
Así contamos en nuestro calendario con:
Egeria.- (Gallaecia- Hispania) Primera viajera y escritora de la que se tienen noticias, desde la Gallaecia romana recorrió toda Europa hasta llegar a tierra Santa y se cree que murió en Tierra Santa.
En el año 384, una mujer escribió en su cuaderno de viajes: «Como soy un tanto curiosa, quiero verlo todo». Se llamaba Egeria y entre los años 381 y 384 cruzó tres continentes, recorrió más de 5.000 kilómetros, en su mayor parte a lomos de un burro (o de una mula) y hoy es considerada la primera gran viajera y peregrina allende los mares de la que se tiene noticia y la primera en dejar un documento escrito de su aventura.
Isabella Bird.-
Como otras trotamundos decimonónicas, Isabella Bird fue recopilando experiencias en unas notas que se convertirían en destacados libros de viajes. Y como muchas otras también, quiso viajar por el mundo hasta que su cuerpo ya no pudo más. Además de viajar como bálsamo para su débil salud, Isabella Bird tuvo siempre a los más desfavorecidos en mente, a los que ayudó siempre que pudo y a los que dedicó parte de los beneficios obtenidos por sus exitosos libros.
Marga d’Andurain.-
Nacida en el país vasco francés, Marga d’Andurain fue conocida en su patria como ‘la reina palmira’ y ‘la Mata-Hari del desierto’. Desde pequeña quedó patente su carácter único, díscolo para su familia que la hizo exorcizar en la catedral de Bayona.
Desde bien pequeña demostró ser un espíritu libre que ninguna escuela, por más estricta que fuera, conseguiría cortarle las alas. Marguerite peregrinó por un sinfín de reputados y estrictos colegios religiosos de los que fue expulsada una y otra vez. Desesperada, su propia madre llegó a organizar un exorcismo en la catedral de Bayona creyendo que su hija estaba poseída por el demonio. Dicha experiencia no sólo divirtió a la díscola Marguerite sino que no consiguió frenar sus ansias de aventura.
Lady Anne Blunt.-
Nieta de Lord Byron, hija de Ada Lovelace, Lady Anne Blunt tuvo una vida apasionante lejos de la Inglaterra victoriana que la vio nacer. Siguiendo los pasos de su rebelde abuelo, lady Anne fue un alma viajera que quedó prendada por el mundo de Oriente Próximo y sus hermosos caballos. Egipto, Mesopotamia y Arabia fueron sus hogares donde vivió experiencias apasionantes junto a su marido. Primera mujer en atravesar el peligroso desierto de Negeb, fue una invitada de excepción de jeques y emires llegando a descubrir un harén desde dentro, algo totalmente vetado para una mujer occidental.
Fueron mujeres doblemente excéntricas por un lado porque se realizaron como mujeres en sus respectivas profesiones sin ser necesariamente esposas y madres ejemplares, en segundo lugar por atreverse a viajar a remotos lugares donde que no existían en los mapa . A las científicas como a las escritoras no se les tomaba en serio.
Cristina Morató