Dice Celtia Rodríguez González que «La mujer, como objeto de estudio en Historia y Arqueología, ha estado invisibilizada. Esta frase no es nada nueva. De hecho, es lo primero que se enseña en los estudios de género: hay que buscar a las mujeres porque no están. La historiografía ha realizado una Historia androcentrista, es decir, todos los cambios producidos para llegar al “progreso” han sido derivados de la interacción del hombre. Por tanto, ¿Dónde han dejado a la mujer?»
Por este motivo desde la Organización de Mujeres CI elaboramos este calendario. Septiembre dedicado a arqueólogas y destacamos a estas grandes mujeres:
Harriet Ann Boyd Hawes (11 de octubre de 1871 – 31 de marzo de 1945)
Fue una arqueóloga pionera norteamericana , enfermera y socorrista. Es más conocida como la responsable del hallazgo y primera directora de Gurnia, una de las primeras excavaciones arqueológicas en dar a conocer un asentamiento y palacio Minóico en la Isla Egea de Creta.
Harriet Ann Boyd nació en Boston, Massachusetts. Su
madre falleció cuando ella aún era una niña , por lo que Harriet fue criada junto a sus cuatro hermanos mayores por
su padre. Su hermano Alex fue quien la introdujo por primera vez en los Estudios Clásicos. Después de asistir a la Escuela Prospect Hill en Greenfield, terminó por graduarse en el Smith College en Northampton, Massachusetts en 1892 con un título en Estudios Clásicos (especializado en Grecia).
Tatiana Avenirovna Proskouriakoff (23 de enero de 1909, Tomsk, Rusia – 30 de agosto de 1985, EE. UU.)
Fue epigrafista, arqueóloga y etnóloga, especializada en la civilización maya. Autodidacta en estas disciplinas, dado que su formación académica era en arquitectura. Llegó a ellas empezando como dibujante. Se la recuerda sobre todo por su contribución esencial al conocimiento de la escritura maya.
María Dolores Fernández-Posse y de Arnáiz (Ferrol, 1945 – Madrid, 2007)
Estudió Filosofía y Letras en la Universidad de Navarra y realizó estudios de Doctorado en Arqueología en la Universidad de Granada.
En 1975 se incorporó como técnico a la Comisaría de Excavaciones del Ministerio de Cultura.
Colaboró en los años 1970 con Antonio Blanco Freijeiro y Beno Rothenberg en los proyectos de Río Tinto (Huelva) y del valle de Timna (Israel). Su tesis doctoral, leída en 1980, se centra en el yacimiento arqueológico Arevalillo de Cega (Segovia), y supone un gran avance en el conocimiento de la Cultura de Cogotas.